Resulta que me lancé hoy a la barata que hicieron en Metropoli aunque por desgracia mi cartera no venía muy bondadosa, ni mi tiempo tampoco, porque tenía que apresurarme para llegar a tiempo al trabajo. Para un músico estar en esas tiendas es como para un niño estar en una enorme juguetería, babeando por todos lados; debo decir que sí habían algunas cosas más baratas, aunque generalmente no mucho de lo que vi con descuentos dignos de un escándalo; de cualquier forma creo que valió la pena darse un tour por ahí.
Aquí les presumo el recuento de los daños, mi nuevo juguetito que es un pequeño Korg nanoPAD para complementar lo que faltaba en mi familia de controladores MIDI. Ahora el reto es buscar cómo sacarle todo el provecho posible para crear sonidos jugosos para la banda, y es donde viene la parte más divertida de todo esto.
Esperemos que me salga tan guerrero como su hermanito.
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